El desempeño educativo de Argentina se encuentra por debajo del promedio de América Latina y el Caribe, según una evaluación de 2019 de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) que coloca al país en su peor nivel desde que se realizan estas evaluaciones hace 15 años.
«Argentina obtuvo menor puntaje que el promedio regional y que el obtenido por nuestro país en 2006 y 2013″, constató en las redes sociales el ministro de Educación, Jaime Perczyk.
El retroceso de Argentina se manifestó en 4 de las 5 evaluaciones analizadas por el Estudio Regional Comparativo y Explicativo (ERCE), elaborado por el Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación (LLECE) de la UNESCO.
En matemáticas y lenguaje (lectura y escritura), las dos asignaturas evaluadas en el tercer grado de primaria, los alumnos (de 8-9 años) tuvieron un resultado 8,3 puntos menor al promedio regional, respectivamente.
En lengua, los estudiantes de sexto grado (11-12 años) alcanzaron el rendimiento promedio de la región, mientras que en matemáticas se situaron siete puntos por debajo.
La prueba de las ciencias naturales, que solo abarcó a los alumnos de sexto grado, también dejó a la nación sudamericana 20 puntos por debajo del resultado que obtuvieron sus pares.
«Los datos de UNESCO muestran la caída promedio en el desempeño respecto al conjunto de la región y a Argentina en el pasado reciente», evidenció Perzcyk.
Al analizar los motivos por los que Argentina ha tenido su peor desempeño histórico en estas evaluaciones desde su inicio en 2006, el ministro de Educación señaló que una de las razones es «la profunda desinversión educativa del periodo 2016-2019».
«Mientras que entre 2003 y 2015 el gasto consolidado aumentó en promedio un 2,7% del Producto Interior Bruto (PIB), pasando del 3,4% al 6,1%, entre 2016 y 2019 cayó en más de 1,3 puntos del PIB cerrando en 4,8%» señaló al comparar el Gobierno de Néstor Kirchner (2003-2007) y Cristina Fernández (2007-2015) con el de Mauricio Macri (2015-2019).
La desinversión educativa durante la gestión anterior se evidenció en los presupuestos destinados a formación docente, infraestructura, innovación, evaluación, conectividad y tecnología, políticas socioeducativas, educación superior y en el l Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), de acuerdo al Ministerio de Educación.
«La única manera de garantizar el pleno derecho a la educación y los aprendizajes de nuestras y nuestros estudiantes es con un Estado activo que financie de forma sostenida e integral el sistema educativo», aseguró Perczyk.
La prueba ERCE evaluó a más de 160.000 niños de más de 4.000 escuelas, lo que abarca a más de 18 millones de estudiantes en los sistemas educativos de América Latina y el Caribe.
Además de Argentina, participaron en este estudio Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay.
Con información de SPUTNIK
